Matias TomboliniDescubre cómo el diseño del etiquetado frontal tiene un impacto significativo en las decisiones de compra de los consumidores.
Desde la comunicación visual efectiva hasta el poder del branding, este elemento clave en el mundo del retail influye en la elección del consumidor y establece una conexión emocional con la marca.
En esta nota, exploramos la forma en la que el diseño inteligente, la transparencia y la destacada comunicación de atributos clave se convierten en factores determinantes al momento de tomar decisiones informadas en el proceso de compra.
Comunicación, política, salud y branding en el mundo del retail
En un mercado cada vez más competitivo, el diseño del etiquetado frontal se ha convertido en un elemento crucial para captar la atención de los consumidores e influir en sus decisiones de compra.
La comunicación sobre salud interesa cada vez más.
Desde los supermercados hasta las tiendas de conveniencia, las marcas se esfuerzan por destacarse en los estantes y comunicar eficazmente las características y beneficios de sus productos, pero también advertir sobre las cantidades y el buen uso del mismo.
En primer lugar, es importante comprender que el etiquetado frontal es la primera impresión que tiene el consumidor sobre un producto. Y por ello siempre debe estar alí una llamada de atención sobre si el producto contiene exceso de azúcares, grasas, sodio, etc. como etiquetas principales.
Es la carta de presentación, el elemento visual que llama la atención y genera interés, por supuesto, en cuanto a otros atributos.
Un diseño atractivo, claro y bien estructurado puede despertar la curiosidad y predisponer al consumidor a favor de un producto, incluso antes de leer los detalles específicos.
La comunicación visual juega un papel primordial en este proceso.
Colores vibrantes, tipografías legibles y elementos gráficos distintivos son herramientas que permiten transmitir información de manera efectiva.
Por ejemplo, un producto saludable puede utilizar tonos verdes y un diseño limpio para resaltar su carácter nutritivo. En contraste, un producto indulgente puede emplear colores más llamativos y diseños más audaces para transmitir una sensación de placer y satisfacción. Priorizando, por supuesto, la transparencia la comunicación y cumpliendo con la normativa vigente.
El branding también desempeña un papel clave en el diseño del etiquetado frontal. Una marca bien establecida tiene la ventaja de contar con el reconocimiento y la confianza del consumidor.
A través de la consistencia en la identidad de marca, como el logo y los colores corporativos, se crea una conexión emocional con el consumidor.
Cuando el consumidor ve una marca familiar en el etiquetado frontal, es más probable que elija este producto, ya que se siente seguro y confiado en la calidad y el valor que representa.
El etiquetado frontal también puede influir en las decisiones de compra al resaltar los atributos clave del producto. Los sellos o certificaciones, como “orgánico”, “libre de gluten” o “bajo en calorías”, brindan información rápida y relevante al consumidor.
Estos elementos comunican beneficios específicos y satisfacen las necesidades y preferencias individuales.
El diseño inteligente del etiquetado frontal puede hacer que estos atributos sean prominentes y fácilmente identificables, lo que a su vez influye en la decisión de compra.
Además, el etiquetado frontal puede jugar un papel importante en la transparencia y la información del producto.
Los consumidores están cada vez más interesados en conocer el origen, los ingredientes y los valores nutricionales de los productos que consumen.
Un diseño claro y legible, acompañado de información relevante y comprensible, permite a los consumidores tomar decisiones informadas y sentirse seguros al elegir un producto que se alinee con sus preferencias y necesidades.